Verano, calor, sol y muchos piensan en vacaciones.
Planificar vacaciones con un bebé no es lo mismo que las vacaciones en pareja, con todo el tiempo disponible para tomar sol, leer, salir.
Primeramente pensar bien donde vamos y en que tipo de lugar vamos a instalarnos.
Tenemos que tener resuelto donde va a dormir el bebito, donde lo vamos a bañar, cochecito para poder movilizarnos, mochila para llevarlo, centro sanitario cercano por cualquier eventualidad, botiquín básico por algún inconveniente.
No te lleves el placard entero pero si pensá bien que ropa y abrigos deberás elegir teniendo en cuenta el lugar en el que vacacionarán.
Es muy necesario saber que a los bebés menores de 6 meses no se le puede aplicar protector solar. Es conveniente que hasta el año no sean expuestos directamente a los rayos del sol pero igualmente a partir de los 6 meses le podés poner protector especial para bebés con la mayor protección.
Los chiquitos deben evitar estar al aire libre en las horas de sol más fuerte, entre las 12 y las 16hs. Antes o después de las horas señaladas, siempre vestiditos con ropa clara, fresca, y gorro.
Si bien están de vacaciones, los bebés deben continuar con sus rutinas, tanto de siestas, comidas y hora de baño en horarios convenientes y similares a los que tenia en casa.
Los más chicos suelen extrañar su cuna, su habitación, sus cosas y es probable que los primeros días puedan irirtarse un poquito debido a los cambios. Un buen consejo es llevarle, objetos que reconozca y le son propios, un juguete, un peluche, su vasito, su trapito de apego. Elementos queridos por el bebé que lo conectan con lo conocido y le es propio.
Serán vacaciones diferentes, más controladas, pero con la felicidad de compartir unos dias fuera de la rutina con nuestro mayor tesoro.